Según informó el Ministerio del Interior, estos arrestos se han llevado a cabo en las comunidades autónomas de Castilla y León, Cataluña, Galicia, Madrid, País Vasco y Valencia. La operación, denominada «Araña-III», ha sido dirigida y coordinada por la Audiencia Nacional, en concreto por el Juzgado Central de Instrucción número 1 y por la Fiscalía.
Las investigaciones realizadas han permitido localizar en las redes sociales numeroso contenido apologético de ETA, PCE-R/GRAPO y Terra LLiure, así como comentarios que humillan directamente a las víctimas. Este contenido apologético carecía de privacidad, puesto que era de acceso público y, por tanto, accesible a cualquier usuario de Internet, explica el ministerio en un comunicado.
Añaden las mismas fuentes que «en el éxito de estas investigaciones ha sido clave la incesante colaboración ciudadana, principalmente a través del portal de Internet «Colabora» de Guardia Civil y de los perfiles oficiales en redes sociales de esta Institución. Estos trabajos investigativos han sido desarrollados por analistas de Información, expertos en la obtención de elementos contenidos en fuentes abiertas. Para realizar estas labores, se han apoyado en herramientas de búsqueda y análisis de la información existentes en las redes sociales de mayor implantación».
Aunque gran parte de estos contenidos han sido difundidos por usuarios anónimos, las investigaciones realizadas por la Guardia Civil han permitido identificar a 19 personas como responsables de estas publicaciones, explican.
Los comentarios y referencias en las redes sociales, llevados a cabo de forma reiterada, en perfiles públicos y con numerosos seguidores adheridos, van desde el ensalzamiento de los asesinatos de miembros de la Guardia Civil por la organización terrorista ETA; el asesinato de agentes de la Policía Autonómica Vasca; el deseo de que se cometan atentados contra alcaldes, miembros del Gobierno, jueces o empresarios; o la burla y ridiculización hacia víctimas concretas del terrorismo, así como expresiones de enaltecimiento de determinados grupos terroristas.
En muchos de los casos se ha constatado que los mensajes ofensivos han sido trasladados a través de dispositivos móviles a las cuentas de las redes sociales desde donde se han publicado los contenidos apologéticos. Por ello, tras las detenciones, el siguiente paso de los investigadores es la salvaguarda en sede judicial de los contenidos de los dispositivos móviles desde los que se han publicado los contenidos delictivos al haber quedado constatado su utilización.
La operación realizada este martes es continuación de las denominadas «Araña-I» y «Araña-II», desarrolladas en mayo y noviembre de 2014 y en las que fueron detenidas 40 personas por realizar las mismas actividades delictivas. Como consecuencia de esas detenciones ya se han celebrado diversos juicios en los que ha recaído sentencia condenatoria sobre las personas detenidas por los delitos de enaltecimiento del terrorismo