Agentes de la Policía Local de Vigo han detenido a un joven de 19 años como presunto autor de un delito de desobediencia, tras intentar agredir a los funcionarios que lo estaban identificando durante una intervención.
Según han informado fuentes policiales, los hechos ocurrieron en la noche de este lunes, cuando una patrulla que se encontraba en la calle Pizarro observó una discusión acalorada entre dos hombres en la vía pública.
Uno de ellos arrojó un teléfono móvil a la calzada y, posteriormente, lo recogió y lo tiró a un contenedor, antes de abandonar el lugar. Un agente recogió el terminal para indagar acerca de su procedencia.
Poco después, los policías localizaron al chico que había tirado el teléfono, y al dirigirse a él para preguntarle de dónde había salido el móvil, el joven emprendió la huida. Ante esta actitud sospechosa, los agentes salieron en su persecución y lograron interceptarlo.
Cuando se disponían a identificarlo, el joven comenzó a gritar y a amenazar a los funcionarios, que tuvieron que reducirlo. El sospechoso se mostró muy agresivo, lanzando patadas e intentando agredir a los agentes, de manera que fue alertada otra unidad del 092.
Los policías lograron que el joven se identificara de palabra pero, cuando estaban verificando los datos, volvió a revolverse y comenzó a darse cabezazos contra una cristalera de acceso a un inmueble. Tras volver a inmovilizarlo, el chico intentó morder a un agente y darle un cabezazo, por lo que acabó detenido por desobediencia y resistencia.