Agentes de la Policía Local de Vigo, han detenido a un vecino de la ciudad, de 32 años, que le dio un puñetazo y una patada a uno de ellos para evitar que la grúa se llevase su coche.
Los hechos, según han informado este jueves fuentes policiales, tuvieron lugar a primera hora de la madrugada del miércoles en la calle Santa Marina, por donde circulaba un vehículo que carecía de seguro desde el pasado julio y que no tenía vigente la ITV. Además, pesaba sobre él una orden de embargo y precinto dictada por la Tesorería de la Seguridad Social.
En consecuencia, interceptaron e identificaron a la conductora, una viguesa de 28 años a la que informaron de que iban a inmovilizar el vehículo y llevarlo al depósito municipal. Según el relato policial, en ese instante, el acompañante comenzó a alterarse y a gritar y a amenazar a los agentes, indicando que el coche era suyo y que nadie se lo iba a llevar.
El cuerpo municipal asegura que los agentes trataron de calmarlo pero el hombre se alteró incluso más al observar la llegada de la grúa, momento en que intentó acceder de nuevo al vehículo, lo que le impidió uno de los agentes interponiéndose entre el coche y él.
Entonces, el ahora detenido presuntamente se abalanzó sobre el agente y lo empujó al interior del coche, donde ambos forcejearon hasta que consiguió atrincherarse en los asientos traseros, desde donde intentó cerrar la puerta del vehículo.
Se lo impidió uno de los agentes, momento en que, según la Policía Local, el dueño del coche le dio una patada en la tibia y un puñetazo en el pómulo izquierdo antes de intentar cerrar por la fuerza la puerta, rompiendo de paso la ventanilla.
Finalmente, se personó un familiar y el propietario del vehículo se prestó a abandonarlo voluntariamente antes de ser detenido como presunto autor de un delito de atentado a la autoridad y otro de amenazas.