Una vez en el lugar, los efectivos desplazados se entrevistaron en la vía púbica con una mujer de 46 años que relató a los agentes que tras haber recibido amenazas de muerte de su hermano había acudido a la Comisaría de la Policía Nacional para denunciarlo.
Poco después, cuando regresaba al domicilio de su padre, ubicado en Coia, había encontrado a su hermano merodeando por la zona. Por ello, al temer que le pudiese agredir, había decidido solicitar la presencia policial.
Los agentes se acercaron a la vivienda del padre de la requirente, y en las cercanías del portal observaron al hermano de la mujer en actitud tranquila, aunque una vez en el domicilio se enfrentó verbalmente a su padre.
Además, la policía pudo confirmar en el teléfono móvil del acusado la existencia de la amenaza de muerte a su hermana, hecho que dio lugar a su arresto.