El hombre acusado de haber causado quemaduras de segundo grado en una pierna, al prenderle fuego cuando se estaba haciendo unas curas con alcohol en el patio del albergue municipal de Vigo, ha negado los hechos y ha afirmado que fue el propio perjudicado el que pisó un charco de alcohol cuando éste ardía, de manera que las llamas se le extendieron por la pierna vendada.
Así lo ha manifestado en el juicio celebrado en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, en el que ha declarado que el día de los hechos, el 1 de marzo de 2021, se encontraba sentado al lado de la víctima, que se estaba haciendo unas curas con alcohol y se había envuelto toda la pierna en una venda.
Según su relato, había dos charcos de alcohol en el suelo y, “por hacer la tontería”, prendió fuego en uno de los charcos, el que estaba más alejado del denunciante. “Como él estaba puesto de Trankimazin y alcohol, puso la pierna encima del charco. Yo intenté ponerle encima una cazadora para apagar las llamas, pero empezó a correr”, ha explicado.
Asimismo, ante el tribunal ha asegurado que el denunciante le pidió 30 euros a cambio de no interponer esa denuncia, pero él no pudo pagarle porque carecía de dinero y de ingresos en ese momento.
En el juicio han prestado declaración otros dos usuarios del albergue, que se encontraban delante cuando ocurrieron los hechos. En ambos casos, los testigos han afirmado que el acusado no prendió fuego a la víctima ni le causó las quemaduras, sino que fue él mismo quien lo hizo.
El denunciante, que no presentó a la vista, sufrió quemaduras de segundo grado y resultó con secuelas importantes, sobre todo porque, según ha explicado una médica forense, no siguió el tratamiento pautado, no se protegía del sol, llevaba las heridas sucias de arena o pelo de perro, y tuvo golpes en la zona que le reabrieron las lesiones. Si hubiera seguido las indicaciones médicas, el nivel de ulceraciones y de secuelas “hubiera sido muchísimo menor”.
Petición de pena
La Fiscalía ha mantenido su acusación por un delito de lesiones y reclama una condena de cuatro años y medio de prisión, considerar “probado” que el acusado prendió fuego al charco de alcohol sabiendo que las llamas se propagarían por la pierna del perjudicado, por lo que hubo dolo.
Mientras, el abogado de la defensa ha solicitado la libre absolución, ya que las declaraciones de los testigos en la sala “han desmontado la versión del denunciante”. Asimismo, ha apuntado que la ausencia del perjudicado en el juicio “es una manera de desdecirse de su postura inicial” y que incluso pudo haber incurrido en un delito de denuncia falsa.