El cadáver de Déborah Fernández-Cervera Neira será exhumado con la autorización del Juzgado de Instrucción 2 de Tui. La jueza dio su autorización tras estudiar la petición formulada por los abogados de la familia en fecha 24 de febrero.
Según informó la familia, la exhumación se llevará a cabo el próximo 18 de mayo (12:00 horas) con el objetivo de hallar restos de ADN que hubiera podido haber bajo las uñas de Déborah. «De modo sorprendente en su momento no se tomaron muestras para su análisis», asegura.
Igualmente se pretende hallar restos de agresión que hubiesen podido pasar desapercibidos en la autopsia y analizar cuantos vestigios sean de interés científico, antropológico o criminalístico. La familia de Déborah explica en una nota de prensa que recibe la noticia con la esperanza de que se una vez exhumado el cadáver se pueda cerrar el círculo sobre la persona que intervino en la muerte. También esperan descubrir a las personas que pudieron ayudarle a esconder y manipular el cuerpo.
«Será un trámite muy difícil pero entienden que deben de afrontarlo», añaden en el comunicado. A ello se une la decisión de la jueza en pasadas fechas que ha autorizado la entrega del disco duro del ordenador de Déborah a los peritos propuestos por la familia, quienes en breve procederán a su recogida para el análisis del mismo.
Recuerdan además que ya lo pidieron por primera vez hace casi un año y por fin se producirá en la esperanza de que el estudio del disco duro pueda también aportar pistas sobre lo ocurrido.