El Ayuntamiento de Vigo aclara que no fueron desplazados todos los efectivos de bomberos al incendio declarado esta madrugada en un edificio ocupado de la ciudad olívica («en ningún momento los parques quedaron desatendidos») y niega las acusaciones de discriminación hacia familias de etnia gitana.
Según explican en un comunicado emitido a última hora de la tarde de este miércoles, las 11 víctimas del incendio trasladadas la pasada madrugada al albergue municipal han sido alojadas a lo largo de esta
jornada en hostales de la ciudad donde permanecerán el tiempo que sea preciso.
Responden también a las declaraciones de la asociación Sociedad Gitana Española, que denunció «trato discriminatorio» por parte del Ayuntamiento a las familias de etnia gitana. A este respecto, aclaran que estas familias han recibido atención «permanente», siendo usuarios de los Servicios Sociales municipales y «recibiendo asistencia en todo aquello que es de competencia municipal».
Añaden que también fueron atendidos por la Xunta de Galicia. «De hecho, los menores fallecidos estaban, por decisión autonómica, en un centro de día».
Defienden su actuación amparándose en el artículo 25 de la Ley de Bases de Régimen Local, que recoge que es competencia de los
ayuntamientos la evaluación e información de situaciones de necesidad social y la atención inmediata la personas en situación o riesgo de exclusión social.
«Esta evaluación e información se ha venido produciendo de forma prolongada en el tiempo por parte de los servicios sociales municipales y la atención inmediata ha consistido, en el ámbito de las competencias municipales, en atender sus necesidades básicas y en ayudas de emergencia para afrontar diversos pagos de suministros y alquileres, entre otros», aseguran.
En cuanto a la situación del inmueble, señalan que se trata de un conflicto entre privados, denunciado por la propiedad en el juzgado que dictó sentencia a favor de la propiedad, asegurando que procedía el desalojo.
«Desalojo que fue paralizado en múltiples ocasiones por la mediación de los servicios sociales de Vigo. En ese momento se pidió informe a los servicios sociales del Ayuntamiento, que informaron de la vulnerabilidad de las familias lo que permitió la paralización sucesiva y reiterada
del desalojo. No obstante, el Ayuntamiento de Vigo intentó realizar una labor de mediación con las familias a través de la Fundación Secretariado Gitano, que realizó el perfil de los usuarios y ofreció diferentes ayudas», defienden.
De las 7 familias iniciales, continúan, consta que en los últimos
tiempos solo habitaban dos en el Caramuxo.
Apuntan también que esta situación de vulnerabilidad fue comunicada a las autoridades competentes, al juzgado en primera instancia y al IGVS (competente en materia de política de vivienda y suelo).
«Desde el Gobierno de Vigo queremos recalcar que se le da el mismo trato a una familia de etnia gitana, que a cualquier otra familia vulnerable, sea cual sea su nacionalidad, etnia, religión u origen. Se siguen criterios profesionales de vulnerabilidad de la familia, al margen, mismo de su situación administrativa», afirman.
«Es más», añaden, el Ayuntamiento de Vigo tiene un convenio nominativo de subvención a favor de la Fundación de Secretario Gitano, «precisamente para realizar una discriminación positiva a favor de este colectivo».
Revisión técnica del edificio
Por otro lado, y en relación al estado de la edificación, el informe de los técnicos de la Oficina de Conservación de la Gerencia Municipal de Urbanismo, que realizaron este miércoles una visita preliminar, recoge que la zona más afectada es el portal de acceso.
La escalera común de acceso a las plantas también presentan un grado de afectación importante. Dado que en estas dos zonas los paramentos están llenos de hollín, no se pudo observar con claridad el estado de la
estructura, que aparentemente no presenta daños que comprometan directamente la resistencia mecánica y la estabilidad del edificio.
En el interior de las viviendas los daños son menores, ya que la entrada de humo quedó limitada por la acción de las puertas, si bien
en algunas se nota que entró el humo.
Así las cosas, los técnicos municipales dictaminaron las siguientes medidas de seguridad: evitar el acceso de personas al interior de la edificación mediante el tapiado de todos los huecos de las fachadas o su
correcto cerrado. Además, deberá colocarse una puerta que permita el acceso a las personas autorizadas.
A lo largo de esta tarde, los residentes en el inmueble han podido
acceder a las viviendas para recoger sus pertenencias o artículos de primera necesidad, acompañados por agentes de la Policía Local, bomberos y psicólogos.
Asimismo, se mantendrá el desalojo del edificio hasta que se acredite que reúne las debidas condiciones de seguridad. El retorno de los ocupantes solo será posible cuando así se autorice por resolución expresa de esta administración, previa evaluación de la documentación que se acerque garantizando la seguridad del edificio. Solo podrán continuar accediendo la dirección facultativa y el personal técnico municipal asignado la este expediente.
También han sido localizados los administradores de la propiedad que se acercaron al edificio y mostraron su disposición de hacerse cargo de las medidas a adoptar tales como el precintado del inmueble y su limpieza.
Operativo del incendio
Por último, el Ayuntamiento de Vigo ha querido aclarar algunos aspectos sobre el operativo desplazado al edificio incendiado. «No es cierto que fueran movilizados todos los efectivos, ya que dos permanecieron en los parques de Teis y Coruxo, uno en cada parque», aseveran.
Se desplazaron los dos trenes de primera salida de ambos parques, conformados por un total de 12 personas, a los que se sumaron el camión escalera de Teis, con dos efectivos y 3 efectivos más (17 personas). El número de efectivos totales de esta intervención fue de 19 profesionales.
«En ningún momento los parques quedaron desatendidos. En cualquier caso, el número de bomberos se mostró suficiente y eficaz», insisten.
De forma simultánea a la extinción, fueron rescatadas en altura dos personas supervivientes y, una vez el fuego estaba extinguido, una operación que se desarrolló en tres minutos, se procedió a la evacuación interior del inmueble, recorriendo planta por planta.
Asimismo, la administración local se hizo cargo de los siete animales de compañía que se encontraban en el interior del edificio en el momento del incendio. Todos ellos fueron derivados en un primer momento al servicio veterinario y, posteriormente, a la protectora municipal.