La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Tui, que instruye el caso de la muerte de la joven viguesa Déborah Fernández-Cervera, cuyo cadáver fue hallado hace casi 20 años en una cuneta de O Rosal, interroga este viernes por primera vez al que es el principal sospechoso para la Policía: el exnovio de la joven.
Acompañado por sus abogados, el sospechoso acudió puntual a la cita en los juzgados de Tui, donde tenía que comparecer a las 09.30 horas. Allí se han amontonado un enjambre de cámaras y decenas de personas. Algunas de ellas pedían con pancartas ‘Justicia para Déborah’.
También se encontraban familiares de la joven, que han mantenido un breve cruce de palabras, cargadas de tensión, con el abogado del investigado. Rosa, hermana de Déborah, espetó al sospechoso: “Ahora vas a tener tu oportunidad, amigo”. Esta afirmación obtuvo la respuesta del letrado: “Calladita estabas más guapa”, replicó.
“Creemos que no declarará o que se acogerá a su derecho legítimo de responder sólo a las preguntas de su letrado”, ha dicho a las puertas del juzgado Rosa, hermana de Déborah y portavoz de la familia.
“Lo que creemos es que no va a portar gran información, pero para mí el hecho de estar hoy aquí y que la jueza y el fiscal les puedan hacer preguntas relativas a los días de la desaparición y los días más importantes en la investigación es vital”, ha añadido.
La comparecencia del exnovio en calidad de investigado se produce después de que la familia de Déborah se lo pidiese a la Audiencia Provincial de Pontevedra, que fue la que dio el paso ante las constantes negativas de la jueza que instruye el caso.
Esta declaración también llega después de que los resultados del análisis efectuado por el Instituto Nacional de Toxicología tras la exhumación del cuerpo de la joven hayan detectado la presencia de ADN masculino en una de las uñas del cadáver.