Las conclusiones a las que han llegado los peritos y las autoridades determinan que todo se debió a un error humano causado por no revisar los cierres de las barras de seguridad de cada cabina del ‘Saltamontes’.
Como consecuencia, la protección del ‘coche’ en el que viajaban las víctimas del siniestro se soltó del lado izquierdo, lugar en el que iba sentada una mujer de 35 años, y provocó que ésta quedara colgando durante un tiempo mientras la atracción seguía girando sobre sí misma con sus brazos subiendo y bajando.
Debido a ello, fue hospitalizada con diversas contusiones y una fractura de tibia y peroné. Por su parte, el niño también fue trasladado a un centro médico pero con lesiones leves. Mientras, el dueño del carrusel, que colaboró en todo momento con la policía y los peritos, anunció que suspendería de empleo y sueldo al operario encargado de revisar los cierres de seguridad de los usuarios.
Así, una vez aclarado todo lo sucedido, las administraciones competentes concedieron el permiso para retomar la actividad, que fue alta este miércoles, último día de las fiestas en el barrio vigués, si cabe debido a que se celebraba el Día do Neno con precios reducidos en los viajes de las atracciones.
Así, a pesar de lo ocurrido y de la repercusión que tuvo el incidente, el ‘Saltamontes’ gozó de una buena afluencia de clientes tras reabrir por la tarde.