El SUP emitió un comunicado en el que avisa de los problemas que se pueden dar en el nuevo hospital por la carencia de una zona para detenidos y pone como ejemplo lo ocurrido hace unos días cuando un preso ingresado intentó huir por una ventana.
«Desde 2012, inicio de la construcción del hospital, el SUP solicitó a la Dirección General de la Policia un pequeño módulo de seguridad para realizar las eventuales custodias en la demarcación de Vigo, pero finalmente no se ha creado dicho módulo y esta misma semana pasada, la tentativa de un detenido de huir nos confirma la razón de la solicitud», señala.
«Sólo el buen hacer de los Policías intervinientes, apoyados por un equipo de Bomberos, ha evitado una desgracia con la posibilidad de que el detenido se precipitara desde la ventana, bien por propia voluntad o por accidente», añaden desde el SUP. Los representanes sindicales consideran que en estos momentos no pueden garantizar la seguridad si hay más de un denteido. «Es imposible, como en este caso, que una sola dotación policial (la falta de personal en Vigo ya es muy preocupante) tenga que custodiar a dos detenidos de manera simultánea, ingresados en el módulo de psiquiatría, donde indudablemente no pueden acceder los agentes y tengan que hacer el servicio desde el exterior, por lo que en caso de que surja una situación de emergencia serían avisados por el personal médico, quienes así mismo les abrirían la puerta de acceso. No cabe duda de que este método de prestación del servicio carece de absoluta seguridad y que la única opción posible es el realizarlo en un módulo adaptado a este fin», explican.
Advierten también que dicho módulo ya no existía en el Nicolás Peñas, ni en el Meixoeiro, ni en el Xeral, pero consideran que «no es comprensible» que no exista en unas instalaciones en las que «hay habitaciones con ventanas practicables, en zonas de acceso libre para pacientes y familiares, sin ningún tipo de control viable sobre las posibles visitas y sin posibilidad de reacción rápida en el caso de tentativa de fuga o de suicidio de los detenidos o presos».
Alertan también de que se pone en peligro la seguridad de los pacientes, familiares y profesionales que trabajan en el Cunqueiro. «Lo sucedido la semana pasada afortunadamente quedará como anécdota pero cabe la posibilidad de que la próxima vez nos encontremos con una desgracia que se puede evitar con una pequeña inversión prácticamente insignificante con respecto a los millones de euros gastados en esto Complejo Hospitalario. No queremos que después de las desgracias, como suele ser habitual, se tomen medidas urgentes (incluso más costosas), es necesario tomarlas con antelación», concluye el SUP.