Las calles de Vigo son habitualmente el escenario en el que los vándalos cometen sus fechorías. Esculturas, monumentos, murales, exposiciones y todo tipo de iniciativas artísticas son atacadas de manera frecuente. La figura de Manuel Castro, el vendedor de periódicos de la calle Príncipe, es una de las obras que más veces ha sufrido la acción de los salvajes. De hecho, todavía no ha sido repuesta tras el último ataque.
La madrugada de este domingo se registraba otro acto vandálico en la ciudad. Según informó la Policía Local de Vigo, los hechos se registraron entre las 02.00 y las 03.00 horas. En esta ocasión la víctima fue la escultura de Buciños inaugurada hace ahora tres años con la humanización de Vía Norte.
El conjunto escultórico, que representa a padres con sus hijos sentados en un banco del cruce con Urzaiz, fue destrozada por dos personas. Los vándalos arrancaron varias partes de las piezas, entre ellas la niña y un brazo, y se las llevaron como botín.
Testigos del ataque dieron aviso inmediato a la Policía y una patrulla realizó una batida por la zona localizando a las dos personas cerca del lugar. Ambos fueron arrestados y trasladados a los dependencias policiales, donde fueron identificados como ciudadanos portugueses y denunciados por daños al patrimonio. Los agentes pudieron recuperar las piezas destrozadas.