Los empleados de construcciones Fernando Alonso, en la parroquia de Beade, vivieron el atraco de este miércoles por parte de 4 varones -tres de ellos encapuchados- y que se saldó con un botín de 4.000 euros como si de una broma se tratase.
O al menos eso es lo que pensaron en un primer momento. En declaraciones a Europa Press, los trabajadores de la tienda explicaron que todo pasó «muy rápido» y que «en menos de tres minutos» los atracadores -con escopetas recortadas-, entraron y salieron con el botín.
«Entraron los tres juntos, todos de negro, encapuchados y con guantes. Nos gritaron ‘todos al suelo, es un atraco’. Estábamos impactados. Al principio parecía una broma», indicaron, explicando a continuación que dos de los varones se quedaron en la entrada del local y otro entró a la oficina donde estaban los responsables.
Allí, según añaden en su relato, solicitaron que se abriese la caja fuerte y que metiesen en una bolsa todo el dinero. «Hablaban correcto castellano, eran de aquí. Pero parecían aprendices. Estaban muy nerviosos, temblaban. Incluso el que vino a por el dinero apoyó la escopeta para agacharse a ver si había algo más dentro de la caja fuerte. Eso me sorprendió», destacó uno de los empleados desde el local.
Asimismo, informaron que ningún trabajador resultó herido pese a que en ese momento había cuatro empleados y dos clientes. «Los que estaban en otra estancia ni se enteraron», subrayan. Tampoco se registraron desperfectos. «Se llevaron el dinero y se fueron muy rápido», concluyeron.
Se da la casualidad de que el mismo local ya sufrió un atraco hace varios años en el que los ladrones también se llevaron el dinero recaudado.