La atracción de feria del «saltamontes» donde falleció el joven Iván Castaño este pasado fin de semana en las fiestas de Matamá tenía la documentación en regla, ya que disponía de seguro obligatorio y contaba con certificado técnico anual en vigor.
Así lo han trasladado fuentes de la investigación consultadas por Europa Press, que han señalado que por ahora se trata de averiguar qué pudo haber ocurrido para que el aparato acabase rompiendo, provocando la muerte del varón.
Todo ello pese a que la atracción tenía en vigor su certificado técnico hasta 2025 y contaba con un seguro de responsabilidad civil general con la compañía Mapfre.
Por su parte, responsables de la comisión de fiestas han informado a Europa Press que ahora son sus abogados los que trabajan también para tratar de conocer lo ocurrido. «Vamos a dejar que sean ellos los que nos digan qué pasó y cómo pudo pasar esta desgracia», ha añadido Cristian González, presidente de la comisión, sin querer ahondar en las causas de lo sucedido.
Sin embargo, sí ha querido aclarar que el joven fallecido, Iván Castaño, residía en Vigo, pero era natural de Viana do Bolo (Ourense). Además, ha descartado la presencia de una menor en el momento del suceso, como se especuló en un primer momento.
Entierro y minuto de silencio en la parroquia
Precisamente este lunes, a partir de las 19:00 horas, el joven será enterrado en el cementerio de la iglesia parroquial de San Pedro de Tuxe, en O Bolo.
Además, esta mañana, se ha llevado a cabo una misa en su memoria en Matamá. Al término, se ha guardado un minuto de silencio en las inmediaciones en las que todavía está la atracción montada y custodiada 24 horas por una patrulla policial.
La comisión de fiestas ha querido enviar un mensaje de apoyo a la familia y ha dado las gracias por todo el cariño recibido por parte de los vecinos. González ha dicho durante el acto que «ni en sus peores sueños pensó que viviría algo así» y ha reiterado que «sus pensamientos están siempre con la familia».
Para el presidente de la comisión de fiestas es necesario conocer qué ocurrió para que esta tragedia nunca más vuelva a pasar, ni en Matamá ni en ninguna otra fiesta.