La Guardia Civil ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias de la Xunta de Galicia cerca de 2.000 mascarillas “ilegales” que fueron intervenidas la semana pasada a un vecino de Vigo durante un control de carretera en el municipio de Vilaboa. Los hechos tuvieron lugar a la altura del kilómetro 33 de la carretera PO-551.
Los agentes observaron que uno de los vehículos inspeccionados llevaba una partida de “mascarillas ilegales que presuntamente pretendía vender y distribuir en distintas farmacias de la provincia”. En el maletero del turismo había 160 paquetes que contenían 1.895 máscaras de protección de distintos tipos, que “carecían de la preceptiva documentación que legalizase su tenencia y comercialización”. “En su descargo, el conductor y único ocupante del vehículo alegó que las compraba a través de internet, las empaquetaba en su domicilio y las distribuía normalmente en las farmacias”, según informa el Instituto Armado.
Al no presentar el conductor ningún tipo de documentación que acreditase el origen legal de las mascarillas, que además carecían de la preceptiva homologación, fue objeto de varias denuncias administrativas. Por un lado, fue propuesto para sanción ante la Consellería de Sanidade por carecer de alta como vendedor-distribuidor de productos sanitarios y ante la Consellería de Innovación, Industria y Comercio al contravenir la legislación de protección general de las personas consumidoras y usuarias por incumplimiento de las disposiciones sobre etiquetado y marcado de los productos.
En el mismo orden de actuaciones, se le denunció también por una infracción de contrabando, ante la Sección de Aduanas e II.EE. de Pontevedra, al no acreditar la legal importación de las mascarillas que constaban fabricadas en un país extracomunitario. Las mascarillas fueron entregadas y puestas a disposición de la Consellería de Sanidade.