Prisión comunicada y sin fianza. Eso es lo que ha dictado la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo para el detenido por la brutal paliza que sufrieron dos jóvenes en la ciudad olívica el pasado fin de semana. La jueza tomó declaración al, por ahora, único arrestado y decidió enviarlo a la cárcel como presunto autor de un delito de lesiones y otro de tentativa de homicidio. Así, atiende las principales peticiones de la Fiscalía, no solo por la gravedad de lo ocurrido sino por el riesgo de fuga, ya que no tiene arraigo laboral demostrable en Vigo.
El acusado, de 33 años de edad y con conocimientos de full-contact, negó los hechos ante la jueza y aseguró que en el momento de la agresión se encontraba en su casa con su pareja, a varios kilómetros de distancia. No obstante, un testigo lo ha reconocido como una de las dos personas que pegaron de forma reiterada a las víctimas. También uno de los agredidos apunta a él como posible autor de la paliza. Adicionalmente, posee unas zapatillas deportivas iguales a las que se pueden ver en el vídeo grabado por un vecino. Ese calzado será analizado por la Policía Científica.
Los agentes encargados de la investigación le identificaron como uno de los sospechosos y lo detuvieron el martes. Pasó a disposición judicial a primera hora de este jueves tras ser trasladado por la Policía Nacional a las 08:00 horas a las dependencias de la calle Lalín. Todavía continúa la búsqueda del segundo agresor. La Comisaría de Vigo-Redondela mantiene abiertas las pesquisas para dar con su paradero.
Los hechos ocurrieron a las 05:00 horas del domingo cuando las dos víctimas resultaron heridas por los golpes recibidos. Tras la brutal agresión, ambos jóvenes, de 20 y 21 años, fueron evacuados al Hospital Álvaro Cunqueiro, donde uno de ellos ingresó con graves lesiones en la boca, en la nariz y en el rostro. En las imágenes del vídeo grabado por un vecino se puede observar cómo se desploma inconsciente y sus agresores huyen por la calle María Berdiales.
El chico con lesiones de mayor gravedad continúa ingresado, mientras que su amigo ya fue dado de alta. Según se desprende de las declaraciones de testigos y víctimas, el detonante de la agresión fue que los jóvenes llamaron la atención a sus atacantes por orinar en el portal de la vivienda de la que salían en ese momento.