La Policía Local de Vigo sigue manteniendo su intenso ritmo de trabajo para asegurar el cumplimiento del estado de alarma. Desde el pasado 16 de marzo los agentes ya han identificado a 1.230 personas y han completado más de 2.700 controles en vehículos, que han tenido como consecuencia la tramitación de 323 denuncias.
Según ha informado este jueves el alcalde, Abel Caballero, este miércoles se remitieron a la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra 25 nuevas propuestas de sanción, una cifra inferior a la del día anterior (45). Este descenso ha sido valorado positivamente por el Concello de Vigo pero el regidor olívico ha avisado de que eso no hará que decaiga la actividad de la Policía Local.
Caballero ha mostrado su “deseo” de que el número de multas baje todavía más pero insistió en mantener el “ritmo” de controles sobre la población. “Se trata de garantizar la salud y la vida de la gente”, recordó.
Por su parte, el 092 informó este jueves de una intervención que también derivó en una denuncia pero por otro motivo. La actuación tuvo lugar de madrugada en la calle Couto Piñeiro, donde una patrulla que circulaba por la calle Colombia detectó a un hombre caminando por la vía pública.
En consecuencia, procedieron a interceptarlo para averiguar el motivo de su desplazamiento y, según declaró el sujeto, venía de una casa okupa y se dirigía a una farmacia del Calvario para comprar Lorazepan.
Los agentes identificaron al individuo, de 53 años, y tras un cacheo le encontraron doce pastillas de Lorazepan y tres jeringuillas. No obstante, al consultar la base de datos comprobaron que al hombre le constaba una orden de averiguación de paradero y domicilio dictada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Vigo.
Ante esta situación, se realizó el correspondiente informe para dar cuenta al juzgado y se le denunció por desobediencia a la autoridad.