La Policía Nacional de Vigo ha detenido a un hombre de 32 años, con domicilio en Huelva y “numerosos antecedentes”, por un delito de tráfico de drogas. Según ha informado este martes la Comisaría de Vigo-Redondela, el arresto se produjo a las 23.30 horas de este lunes en el marco de la Operación ‘Guernica’. En ese momento se interceptó en las inmediaciones de Tui a dos vehículos que circulaban por la N-550 en dirección a O Porriño y que iban cargados con 100 kilos de hachís. Se trata del mayor alijo de esta sustancia intervenido en los últimos meses en la provincia de Pontevedra.
Los agentes, que ya sospechaban que estos coches pudieran traer “una gran cantidad de sustancia estupefaciente”, creen que los automóviles habían utilizado la ruta portuguesa para realizar el trayecto desde el sur de la península hacia Galicia. Tras efectuar una “minuciosa inspección del interior” se comprobó que los habitáculos podrían estar manipulados ante el “fuerte olor” que desprendían. Así pues, los vehículos fueron trasladados a dependencias policiales para desmontar parte de los bajos y las defensas.
Tras “un arduo trabajo”, los agentes localizaron en un Citroën C4 más de 55 kilos de hachís repartidos en pequeños envoltorios en un habitáculo preparado para ello “de forma rudimentaria y aprovechando los huecos del propio vehículo, con la clara intención de ocultar la mercancía y evitar posibles controles policiales durante el trayecto”. Mientras, en el otro coche, un Seat Ibiza, se descubrieron unos 45 kilos de hachís tras la tapicería del lateral derecho, escondidos sin utilizar para ello “ningún método sofisticado, simplemente la retirada del plástico que cubre el salpicadero del propio vehículo”.
La droga se hallaba prensada en tabletas de 100 gramos y repartida en paquetes de medio kilo. Todo ello preparado para su distribución y venta. “Este método de ocultación conocido en el argot policial como ‘caleta’, es muy común para traslado de este tipo de sustancia estupefaciente, utilizado por la delincuencia organizada, teniendo para ello una red de talleres concertados que de manera cada vez más sofisticada, buscan los rincones más inesperados para ocultar la droga”, explica la Policía Nacional.
“Tras la detención del conductor de uno de los turismos, se intensificó la búsqueda de los ocupantes del otro vehículo, que no han sido localizados hasta el momento”, prosigue la Comisaría de Vigo-Redondela. Los investigadores creen que las personas implicadas pertenecen “a una organización que operaba en el sur de Galicia, donde se distribuía y vendía la droga” y que esta red “realizaba varios viajes mensuales desde esta comunidad al sur de España”. La investigación sigue abierta y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días.