La Policía Nacional ha dado a conocer este miércoles el balance de las actuaciones realizadas tras los altercados que rodearon este domingo al partido que disputaron en Vigo el Racing de Ferrol y el Nàstic de Tarragona. Según esta información oficial, se ha detenido a tres personas por su presunta participación “en diferentes delitos de atentado a agentes de la autoridad y desórdenes públicos”. Además, dos efectivos del cuerpo nacional resultaron heridos y tuvieron que ser atendidos en un centro médico de la ciudad.
Los hechos se produjeron durante la tarde del pasado 5 de junio, primero en los aledaños del estadio de Balaídos y luego en el interior, donde se iba a disputar una de las semifinales de la fase de ascenso a Segunda División. La Comisaria de Vigo-Redondela estableció un dispositivo de seguridad especial para garantizar la seguridad y el orden público. No obstante, según relata la Policía Nacional, en las horas previas a la celebración del encuentro un grupo de aficionados del Nàstic de Tarragona se desplazó a bares frecuentados por seguidores radicales del Celta, que se unieron a ellos.
Según investigaciones previas, se tenía conocimiento de antecedentes de enemistad entre aficionados locales y del Racing de Ferrol, por lo que el dispositivo de seguridad contemplaba el acompañamiento en todo momento de los hinchas del equipo departamental desde las afueras de la ciudad hasta Balaídos.
Sin embargo, en el momento en que confluyeron ambas aficiones se produjeron altercados que “fueron contenidos rápidamente por agentes de la Policía Nacional”. Varios efectivos, según prosigue la Comisaría de Vigo-Redondela, “recibieron empujones, patadas, puñetazos, lanzamiento de objetos tales como botellas de cristal y piedras, impactando muchas de ellas contra los policías y contra diversos vehículos que se encontraban estacionados en las inmediaciones del estadio”.
También en el interior de estadio, durante la celebración del partido, se produjo un nuevo enfrentamiento que fue rápidamente atajado por los agentes de la Policía Nacional mediante una carga. Ambas aficiones fueron ubicadas en la grada de Río, que registró una pelea en la zona de cantinas. En relación a estos hechos, los agentes detuvieron a tres personas, que fueron trasladas a dependencias policiales.
Como consecuencia de dichos incidentes, varias de estas personas han sido propuestas para sanción por la Ley 19/2007, del 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, y por la Ley 4/2015, del 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana. Estas multas oscilan entre los 3.000 y los 6.000 euros. También podrían conllevar la prohibición de entrada a recintos deportivos de seis meses a un año.