La Policía Local ha detenido a un hombre, F.J.C.L., de 56 años de edad, por un presunto delito de robo con violencia o intimidación después de que éste acudiese a un edificio portando dos sierras de metal y un machete para forzar el candado de un trastero.
Los agentes recibieron el aviso el domingo a las 17:17 horas de que se estaba produciendo una acalorada discusión entre vecinos en un garaje situado en la calle Tomás Alonso. Al llegar, los policías se entrevistaron con la mujer que hizo la llamada, P.C.B, de 78 años de edad, acompañada de A.R.L, de 75 años, ambos de Vigo.
La mujer relató a los agentes que había prestado a un conocido un juego de llaves de su vivienda, así como del trastero de la misma, al objeto de que la ayudase ante cualquier situación adversa que le sobreviniese, dado que tiene un delicado estado de salud –concretamente se encuentra impedida en silla de ruedas– e iba a ser ingresada en el Hospital Álvaro Cunqueiro.
Según relató, el aludido había accedido 15 días antes a su vivienda sin consentimiento ni dar aviso alguno, llevándose varios aparatos electrónicos y el contenido de su frigorífico, no denunciando el hecho la solicitante del servicio debido a los problemas de salud y movilidad que padece.
El hombre, además, llamó a la mujer para comunicarle que iba a acceder al trastero para retirar varios objetos, negándole esta permiso para tal gestión y exigiéndole que le devolviese el juego de llaves. Además, la mujer había colocado un candado para evitar que el hombre pudiese acceder al mismo.
Posteriormente volvió al garaje con el hombre que la acompañaba, encontrándose al ahora detenido, que portaba dos sierras de metal y un machete con los que trataba de forzar el candado colocado recientemente.
Esto motivó el inicio de una discusión, mostrando F. C, una conducta agresiva hacia P.C, comenzando a bracear, lo que llevó a A. R, a interponerse, debido al delicado estado de la mujer.
Ante esto, F. C, reaccionó violentamente, barriendo a A. R, y tirándolo al suelo, para acto seguido echarse sobre él, sujetando ambas manos del supuesto agresor, dado que todavía portaba en una de ellas el hacha que estaba utilizando para tratar de forzar el candado.
En ese momento fue cuando la mujer pidió la intervención de la Policía Local, que a su llegada comprobó los daños causados en el marco de la puerta y el candado del trastero, procediendo a la detención del hombre.