Si usar el teléfono móvil conduciendo un coche es ya de por sí peligroso, manejarlo mientras se pilota una motocicleta dispara sustancialmente los riesgos. Aun así, algunos motoristas hacen caso omiso a las constantes advertencias de las autoridades de tráfico. Fue el caso de un usuario que el pasado martes circulaba por la autovía A55 y fue visto por una patrulla manipulando su terminal.
Según ha informado este jueves la Benemérita, la dotación le vio concretamente a la altura del kilómetro 3 de la autovía, en dirección al centro de Vigo y antes del semáforo que regula la entrada en el casco urbano. Los agentes fueron tras él hasta interceptarlo en el kilómetro 2, ya en la avenida de Madrid. En ese instante, “todavía iba manipulando el teléfono”.
Una vez identificado, se le denunció por la infracción cometida, que supone una sanción económica de 200 euros, así como la pérdida de 3 puntos de su permiso de conducción. Se da la coincidencia de que esta conducta está comprendida dentro de las distracciones en la conducción y esta semana la DGT está llevando a cabo una campaña activa contra este tipo de actitudes al volante.
El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra recuerda que las distracciones siguen siendo la primera causa de los accidentes mortales de tráfico. Concretamente en 2019, la distracción aparece como factor concurrente en un 28% de los accidentes con fallecidos, por lo que se realizará una vigilancia específica tanto en vehículos rotulados como camuflados sobre dichas conductas.