El alto tribunal gallego ha ordenado la devolución de las actuaciones a la sección cuarta de la Audiencia de Pontevedra para un nuevo enjuiciamiento de la causa con nueva composición del tribunal.
El TSXG ha estimado el recurso de este adinerado empresario portugués en el que se cuestionaba la imparcialidad objetiva de las magistradas que integran el tribunal de la Audiencia al haber ratificado, en dos ocasiones, su prisión provisional.
El Superior entiende que las magistradas “entraron en contacto con el material de instrucción, expresando y valorando su contenido”, por lo que considera “justificadas” las dudas sobre la imparcialidad objetiva del tribunal sentenciador.
El pasado mes de mayo la Audiencia Provincial había considerado probado que Carlos I.P. pretendía acabar con la vida de su esposa, Eliza G.P., modelo rumana de 27 años, cuando apareció “por sorpresa y por detrás” de la víctima cuando se duchaba en el baño. También se tuvo en cuenta la agravante de parentesco y se le impuso al acusado la prohibición de aproximarse y comunicarse con la víctima durante 18 años. Además, tuvo que abonarle una indemnización de 16.000 euros.