La rotonda situada en la confluencia de la Avenida da Florida y la calle Martín Echegaray ha vuelto a ser el escenario de un aparatoso accidente de tráfico, el tercero en un mes, con un conductor ebrio como protagonista. Ya ocurrió los pasados 1 y 22 de octubre y ha vuelto a suceder este 1 de noviembre, según ha informado la Policía Local este viernes.
El cuerpo municipal reveló que a las 22.55 horas del pasado martes se recibió una llamada en el 092 para avisar de que un vehículo había saltado la glorieta y había chocado contra una de las señales de tráfico que hay en ella. La persona que daba la voz de alarma añadía que el conductor se mostraba “mareado o ebrio”, sin poder concretar el motivo de su estado.
Una vez en el lugar, una patrulla de Atestados comprobó que, efectivamente, el conductor presentaba “claros síntomas de encontrarse bajo los efectos del consumo de bebidas alcohólicas”. Así lo ratificó el test de alcoholemia, que arrojó un resultado positivo de 0,97 y 0,95 mg/l de alcohol por aire espirado. Esta cifra cuadruplica el máximo permitido (0,25) y excede el límite penal establecido (0,60).
Por tanto, el hombre, un vigués de 67 años, quedó investigado por un delito contra la seguridad vial y tendrá que comparecer ante el juzgado, al que se remitieron las diligencias correspondientes.