La Policía Nacional ha informado este viernes, a través de un comunicado, de la clausura de “uno de los últimos clubs de alterne de Vigo”, como culminación de una actuación dirigida por la Fiscalía de Vigo en colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo.
Esta intervención policial se originó en una investigación iniciada hace un año por la Unidad Central de Redes de Inmigración y Falsedades Documentales (Ucrif) de Vigo tras tenerse conocimiento de que mujeres extranjeras en situación irregular estaban ejerciendo la prostitución en un local de alterne situado en la zona de Castrelos.
Con el objeto de corroborar lo denunciado, agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras y funcionarios de la Inspección de Trabajo realizaron “diversas actuaciones”, con las que lograron identificar en cada operativo a extranjeras trabajando en el local sin estar dadas de alta en la seguridad social, incluso en situación irregular en España. La Comisaría de Vigo-Redondela no ha especificado cuántas personas eran víctimas de esta explotación.
Tras “largos meses de investigación”, los agentes avisaron de todo ello a la Fiscalía de Vigo, que incoó diligencias de investigación penal tras analizar los correspondientes informes y atestados policiales. Como resultado, se imputó al administrador de la empresa y regente del local como presunto autor de un delito contra el derecho de los trabajadores. Asimismo, se decretó el cierre del establecimiento, que tuvo lugar a finales de septiembre.
“La Policía Nacional agradece la colaboración ciudadana para identificar y resolver posibles delitos, y recuerda la posibilidad de denunciar, incluso de forma anónima, a través de canales específicos para la protección y asistencia de Victimas de Trata de Seres Humanos al teléfono 900 105 090 y correo electrónico trata@policia.es”, apunta la Comisaría de Vigo-Redondela.