Catorce personas han sido detenidas por su relación con una organización que explotaba sexualmente a mujeres en clubes de alterne y casas de citas de Pontevedra, tres de las cuales fueron liberadas. Esta red, que contaba con colaboradores en Brasil que facilitaban documentos falsos para que las mujeres viajaran a España, se aprovechaba de la vulnerabilidad de las víctimas, según informa en un comunicado la Policía Nacional. Cinco de los arrestos se han producido en Vigo, tres en Tomiño, dos en Ponteareas, dos en O Porriño, uno en Nigrán y uno en Villagarcía de Arousa.
Todas ellas eran mujeres con cargas familiares y en situación de necesidad económica, que contraían con la organización una deuda de hasta 2.000 euros por su traslado. Esta cantidad iba en aumento si se negaban a mantener relaciones sexuales con uno de los principales responsables de la organización, que «probaba» a las mujeres, según el comunicado, «para ver si servían».
Uno de los dirigentes de la red se encargaba de captar a las víctimas en Brasil y gestionaba el viaje en avión hasta territorio español, utilizando para ello visados de estudiantes y certificados de vacunación contra la Covid-19 falsos, alojándolas hasta su entrega a otro de los cabecillas.
Este regentaba los clubes de alterne donde explotaban a sus víctimas que, según confirman a Efe fuentes de la investigación, estaban situados en las localidades de Tomiño, Ponteareas y O Porriño, empleando además también dos pisos en Vigo.
La entrada en Europa se realizaba fundamentalmente a través de Lisboa, desde donde las víctimas eran trasladadas por carretera a los clubes o pisos de citas y, una vez en España, las llevaban a diario en taxis de confianza de la red criminal a otros establecimientos.
A las víctimas, principalmente de nacionalidad brasileña, los integrantes de la organización les facilitaban los billetes de avión y les daban una cantidad económica en concepto de «viático» para justificar los requisitos de entrada en territorio Schengen.
Debido a su traslado a España, las víctimas contraían una deuda económica de hasta 2.000 euros, obligación que desconocían en el momento de su captación y que debían saldar ejerciendo la prostitución en los clubes de alterne y en las casas de citas.
Cobros y multas
Debían estar disponibles las 24 horas a través de una página web que el entramado destinaba a la publicidad de la prostitución, anuncios en los que constaba el número de teléfono de cada una de sus víctimas y por los que además ellas debían pagar la cantidad de 30 euros. Por cada servicio sexual, según los investigadores, debían entregar entre 10 y 20 euros o el 50% de lo que cobraban en las casas de citas.
La organización criminal también se lucraba del alterne de las mujeres con los clientes, llevándose 10 euros del pago de las consumiciones a las que eran invitadas por los clientes, y de su propio alojamiento, que podía llegar hasta los 100 euros semanales. Además, les imponían a sus víctimas un sistema de multas que iba de los 30 a los 60 euros, del que no se explicaba motivo alguno sobre la supuesta infracción cometida.
Registro y clausura
A los 14 detenidos se les investiga por los delitos de pertenencia a organización criminal, trata de seres humanos con fines de explotación sexual, favorecimiento de la inmigración ilegal, prostitución y blanqueo de capitales. En la operación se han realizado cinco entradas y registros en los tres clubes de alterne y los dos pisos, que fueron clausurados por orden judicial.
Los agentes han intervenido además un vehículo de alta gama, casi 12.000 euros en efectivo, más de diez terminales móviles, otros dispositivos informáticos y diversa documentación relacionada con la investigación.