Un vecino de Vigo de 35 años protagonizó este miércoles por la tarde en Vigo una temeraria huida de la Policía Local que acabó con él arrestado y con un agente teniendo que desenfundar su arma reglamentaria. La persecución se inició en la Travesía de Vigo y se prolongó por varias calles después de que una dotación que patrullaba por la zona pasadas las 21.00 horas escuchara de repente un “frenazo brusco” y viera a un vehículo saltándose en rojo el semáforo que regula el tránsito de peatones en la calle Numancia, “obligando a ocho viandantes a acelerar el paso para evitar ser arrollados”.
Según informa el cuerpo municipal, los agentes activaron los dispositivos ópticos y acústicos pero el conductor del coche no aminoró la velocidad y al llegar a la calle Doutor Canoa realizó un brusco cambio de sentido con el que estuvo a punto de atropellar a otro grupo de peatones. Ante esta situación, la unidad solicitó el apoyo de otros vehículos policiales.
“En su fuga ascendió por la calle Antón Beiras, accediendo a José María Acuña y Pino donde finalmente se introdujo en un callejón sin salida, poniendo en peligro en todo ese trayecto a los viandantes que en algunos puntos trataban de cruzar la calzada”, explica el 092.
Fue ahí cuando se produjo el momento de mayor tensión. Un agente se bajó del coche oficial y se introdujo en el callejón, donde observó a dos hombres y una mujer a pie junto al vehículo fugado. “Mientras que la mujer permanecía junto al vehículo, ambos varones avanzaron hacia el actuante, invitándoles a que se detuviesen y permaneciesen en el lugar en el que se encontraban. Lejos de hacerlo, continuaron hacia el funcionario con gesto intimidatorio, llegando el ahora detenido a introducir la mano en el bolsillo derecho del pantalón. Ante este gesto, y tras varias advertencias, el actuante se vio en la obligación de desenfundar el arma reglamentaria, siendo apoyado en ese momento por otro componente que llegaba al lugar”, relata la Policía Local.
Finalmente, este último sospechoso, que era quien iba al volante del automóvil fugado, fue arrestado a pesar de oponer “una gran resistencia activa”. Además, los agentes comprobaron que presentaba signos externos de haber consumido recientemente algún tipo de droga, por lo que se le sometió al test correspondiente, que arrojó un resultado positivo en cocaína, metanfetaminas, anfetaminas y THC. Por esta circunstancia, se cursó la correspondiente denuncia administrativa y se retiró el vehículo al depósito municipal.
Mientras, los acompañantes quedaron en libertado al considerarse que “no tuvieron una participación activa” en las causas que motivaron la detención.